Si bien ya venimos observando una tendencia creciente en salir de los núcleos urbanos para vivir en zonas mas tranquilas, en contacto con la naturaleza, a día de hoy esa tendencia se está disparando debido a la crisis del coronavirus.

No solo porque los medios ya lo están anunciando. En nuestra oficina lo estamos notando y mucho. El teléfono suena para preguntarnos hasta por un molino harinero para rehabilitar en una pedanía de Ayllón o por una casa de pueblo en BlascoSancho, Ávila, inmuebles que, antes de la crisis, teníamos prácticamente parados.
Los clientes nos cuentan que durante el confinamiento han decidido vender su casa y comprar en la sierra, un chalet con jardín, con más metros cuadrados y pagar menos de lo que pagan ahora.
El creciente tele trabajo es otro de los factores que está posibilitando este cambio. España se ha visto forzada a ponerse las pilas con las nuevas tecnologías que hacen posible trabajar eficazmente desde casa.
Así pues, tras 2 meses de confinamiento en la ciudad y la creciente posibilidad de trabajar desde casa, la opción de comprar en un pueblo de la sierra está resultando de lo más apetecible. Y es que, ya lo decimos nosotros: vivir en la sierra, en una zona bien comunicada te permite vivir mejor, a menor precio. Y aunque haya que trasladarse a la capital, el tiempo de desplazamiento suele ser parecido al de la media de trabajadores que viven en la misma urbe, alejados de su trabajo y que por tener que hacer trasbordos varios, acaban tardando lo mismo o más.
Muchos no saben dónde ir, no tienen preferencias, solo buscan una buena oportunidad, en un pueblo agradable, con colegios buenos, servicios mínimos, buenas comunicaciones y que no esté del todo apartado. En estos casos, les asesoramos sobre los distintos municipios de la sierra. Si es tu caso, no dudes en llamarnos, te ayudamos en todo lo que podamos.